Un estudio de la Sociedad Americana del Corazón revela que las personas que juegan Pokémon Go caminan dos mil pasos extra todos los días.
Esto se traduce en un 8 por ciento menos peligro de sufrir un ataque cardiaco o una embolia para personas de alto riesgo.
De hecho los jugadores que tenían una vida sedentaria, son lo que más se beneficiaron al salir a cazar estas criaturas virtuales.