Una mujer de 21 años de edad que padece insuficiencia renal dice que su hermano puede ser su última esperanza de supervivencia, por lo que ha rogado al gobierno de Estados Unidos que no lo deporte.
"¿Hay tiempo para mí? No lo sé. Podría morir cualquier día", dijo Jazmín Longoria-Lara. "He visto a tantas personas fallecer que comenzaron al mismo tiempo que yo la diálisis, y se han ido, eso me da miedo".
La madre de Longoria-Lara donó un órgano a su hija después de que una enfermedad infantil derivó en insuficiencia renal, pero ese riñón falló hace cuatro años. Desde entonces, ella ha tenido que someterse a diálisis durante varias horas, tres veces a la semana.
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El hermano de Longoria-Lara, de 27 años de edad, Argenis, es compatible y quiere donar a su hermana, pero está en custodia y podría ser deportado a México el fin de semana.
"Creo que eso es injusto, como la forma en que el sistema es", dijo Longoria-Lara.
Su hermano se declaró culpable de un cargo de robo y su ciudadanía estadounidense fue revocada.
La familia espera que las circunstancias extremas de su hermana vayan a convencer a un juez a que reconsidere o retrase la deportación hasta después de que ella ha tenido la operación para salvarle la vida.
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"Sé que son seres humanos", dijo Martha Jeschke, tía de Longoria-Lara. "Ella no tiene mucho tiempo. Es algo que tenemos que hacer pronto".
El corazón de Longoria-Lara se ha agrandado y los médicos dicen que ahora ella también corre el riesgo de tener un ataque al corazón.
"Cada hora que pasa es fundamental para mí", dijo.
Su hermano está programado para aparecer en la corte de aduanas en Chicago el viernes para una audiencia y una posible deportación. La familia planea estar en la audiencia y espera cambiar la idea del juez.
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