Un concejal de Chicago presentó una idea a través de la cual un filántropo o empresa podría apoyar económicamente la asignación de policías fuera de servicio en la calle para procurar mayor seguridad.
El consejal Brendan Reilly, originalmente lanzó la idea en octubre pasado, y está insistiendo con ella nuevamente tras los incidentes del fin de semana por la actividad de la mafia en Michigan Avenue. Su plan propone que los policías fuera de servicio trabajen un mínimo de seis horas diarias y ganen$ 30 por hora. El dinero sería suministrado por las empresas, grupos cívicos e iglesias en un momento en que las finanzas de la ciudad están complicadas. Los oficiales vestirían uniforme completo y estarían bajo el mando de supervisores de la policía. "Esta es una manera de hacer uso de los agentes de policía bien entrenados que se encuentran trabajando de otras cosas, y hacerlos volver a la calle a hacer lo que mejor saben hacer, un gran trabajo de la policía", dijo Reilly. Además, su plan no sólo se aplicaría a los barrios más acomodados de la ciudad. Y admitió también que es una "herramienta creativa" y no es una solución a largo plazo para los problemas de la ciudad. "Esta es una medida para salir del paso", dijo el Consejal. "Una solución a largo plazo es que tenemos que agregar más policías de guardia en el departamento de policía."
