Centenares de bomberos lograron contener un colosal incendio en una planta procesadora de alimentos en el sureste de Wisconsin y los residentes locales que habían sido evacuados fueron autorizados para regresar a sus casas. El incendio se inició la noche del miércoles en la planta de Echo Lake Foods en Burlington. La policía evacuó a unas 50 personas de la zona. Afortunadamente no se han reportado heridos. El alcalde de Burlington, Bob Miller, dijo que especialistas en sustancias peligrosas han asegurado el área donde se almacenan tanques químicos. Los funcionarios estatales de emergencia dicen que hubo una "mínima fuga" de los residuos de amoníaco en las tuberías de amoníaco, y que se está monitoreando la calidad del aire. Los bomberos de más de 80 departamentos de bomberos del sur de Wisconsin y del norte de Illinois se turnaron en la lucha para combatir las inmensas llamas. La causa del incendio está bajo investigación. Agravando la situación, los bomberos tuvieron que trabajar bajo temperaturas de 15 grados. La semana pasada más de 200 bomberos combatieron un incendio de cinco alarmas en un almacén abandonado en el barrio de Bridgeport, en Chicago. Las temperaturas congelantes dejaron de seis a ocho pulgadas de hielo en todo el exterior del edificio mientras que el fuego se reavivó varias veces en el interior de la estructura.
